jueves, 17 de septiembre de 2015

TEMPLOS Y FILOSOFÍA BUDISTA



TEMPLOS Y FILOSOFÍA BUDISTA



De acuerdo con la filosofía Budista el hombre permanece adormecido en un cuerpo físico que impide su desarrollo en el campo espiritual, y su estado se debe a la cultura del apego… un apego a todo tipo de situaciones, personas y objetos; un apego que se enraíza  en el campo material; apego a mi familia, a mi casa, a mi dinero, a mis bienes, a mi estado de confort, a mi trabajo etc.

Según principios Budistas la ira, la avaricia y la ignorancia son las tres llaves que dominan al ser humano por eso debemos luchar contra estos sentimientos o estados para poder encontrar la iluminación espiritual y ascender. El estado de gracia o iluminación se da cuando descubrimos nuestra misión en el universo y comenzamos a comprender las leyes que nos rigen con respecto a nuestros pares y nuestro entorno.

Todos los templos Budistas reflejan en su aspecto físico criterios de estética, orden y simetría que les proporcionan a sus monjes y visitantes una sensación de paz, equilibrio y estabilidad en concordancia con el cuerpo físico y espiritual. En muchos casos los templos que se encuentran circundados por un entorno  natural enclavado en las montañas no son muy visitados por turistas ya que los rituales de los monjes requieren de retiro y meditación en equilibrio perfecto con la naturaleza, mientras que los templos ubicados en zonas más urbanas pueden acoger mayor número de visitantes ya que en ellos se prestan servicios de asesorías espirituales, enseñanza de reiki, yoga y meditación.

Por lo general los templos Budistas conservan una estructura que consta de columnas y vigas que dan sustento a lo que en la espiritualidad se le denomina castillo o cuerpo que contiene los siete chakras. Muchos de los salones donde se practica el canto de mantras poseen un piso de madera que funciona como aislante de descargas energéticas.


Otra característica arquitectónica es que la gran mayoría de estos templos posee unas barandillas en madera o unos patios en gravilla que tienen como objetivo separar las zonas sagradas (donde solo pueden acceder los monjes) de las zonas de acceso al público visitante.

Finalmente, algo muy atractivo es que en algunos templos existen los senderos o laberintos de la incertidumbre; estos son unos espirales formados por rocas o plantas en contacto con la hierba, su finalidad consiste en lograr que quienes ingresen en ellos en total actitud de disposición puedan encontrar la capacidad para enfrentar situaciones difíciles por medio de la incertidumbre pues, este elemento permite que Dios nos dirija por los caminos que más nos convengan en lugar de dirigirnos por los caminos de nuestra caprichosa voluntad.

Un saludo afectuoso,


Gloria Patricia Zapata Vanegas

1 comentario: